Un niño abandonado en un cementerio antes de Nochebuena junto a su perro. Parecía un cuento de Navidad muy triste, pero ha tenido un final aparentemente feliz. Dos días antes de Navidad este niño de tres años fue abandonado en un cementerio del condado de Medina, en Ohio, Estados Unidos. La historia conmovió tanto a la opinión pública que una vez que el niño fuera recogido por las autoridades policiales de la localidad de Hinckley, la comisaría se lleno de regalos hasta el punto de que desde las redes sociales la policía llegó a explicar que no disponían de tanto espacio para guardar tantas cosas. Hubo también muchas ofertas de personas para acogerlo o adoptarlo.
Los agentes encontraron a sus padres, después de que que el pequeño de tres años fuera abandonado en un cementerio junto a su perro en la mañana del miércoles previo a Nochebuena. Un testigo manifestó que un automóvil se alejó a gran velocidad dejando al niño y al can solos en tan siniestro lugar. El niño corría detrás del coche con su perro hasta que el auto se perdió en la lejanía, en la carretera 303 con destino a Brunswick. El pequeño, de nombre Tony fue puesto bajo custodia policialy pasó a ser tutelado durante estas fiestas por los Servicios Sociales para menores del Condado de Medina, y pasó unos días con una familia de acogida.
La investigación se está focalizando en la madre del niño abandonado en el cementerio, pero, de momento, no se presentarán cargos contra ella
El niño está ya con su padre. No tuvo nada que ver con lo ocurrido, según han revelado medios como https://www.wistv.com/, que señalan, citando fuentes policiales, que la madre del pequeño es quien está siendo investigada. Al parecer, tiene problemas de salud y en estos momentos recibe tratamiento médico. No se presentarán cargos contra ella hasta que se recupere y se está intentando proteger su identidad hasta que no sea acusada formalmente, ha manifestado David Centner, el Jefe de Policía de Hinckley, la comisaría donde permaneció el pequeño al principio. Fue él quien agradeció la generosidad y entrega de los vecinos pero sugirió que hicieran las donaciones de juguetes y dinero a entidades de caridad que ayudan a los más necesitados. Aunque no se han dado datos para proteger la privacidad de la progenitora, todo hace pensar que tiene algún tipo de problema mental. El niño se encuentra muy bien, según ha manifestado el padre a la Policía de Hinckley, que ha dado cuenta de estos detalles en su cuenta de Facebook.