Claves para trabajar la autoexigencia, lidiar con las expectativas y establecer un balance saludable

TherapyChat se une al Día de la Mujer con la elaboración de unos consejos para conseguir ese balance y aprender a lidiar con las expectativas ajenas y propias.

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Mujer estresada
Mujer estresada

“Tú puedes”. “No te rindas”. “Sigue adelante”. “Es ahora o nunca”. Estas y otras frases similares se han convertido en el estandarte del movimiento positivista dirigido a las mujeres que ha cobrado fuerza en la última década. Su objetivo es sencillo, empoderar y devolver la confianza en sí mismas a las féminas de todo el mundo. Sin embargo, lo que a veces pasamos por alto es que, en el intento de motivar a las mujeres a dar lo mejor de sí y retomar el control de sus vidas, podemos estar exigiéndoles y presionando demasiado como sociedad. 

Por eso, con motivo del Día de la Mujer, TherapyChat, plataforma de psicología online que permite a sus usuarios acceder a psicólogos de distintas especialidades a través de videollamadas, da las claves para conseguir ese balance y aprender a lidiar con las expectativas ajenas y propias:

  1. Exígete menos. Sé un poco más realista y no intentes convertirte en una “superwoman”. No pasa nada si a veces no puedes con todo, las cosas no salen perfectas, las aplazas o te equivocas. La vida ya es demasiado difícil como para que te añadas una presión innecesaria.
  2. Ponte límites. Solemos pensar que podemos con todo, pero en realidad no siempre es así y cuanto antes seamos conscientes de ello, antes podremos centrarnos en las tareas que en realidad son significativas para nosotros. Ponerte límites a ti misma te ayudará a gestionar mejor tu día a día, evitando que te pases de la raya y te exijas demasiado.
  3. Prioriza. Cada día tiene 24 horas y, por más que quieras, no podrás alargarlo. Por tanto, debes aprender a priorizar las tareas “urgentes” de las realmente importantes, aquellas que te hacen avanzar hacia donde quieres. De esta manera, podrás deshacerte de muchas tareas basura que en realidad solo te generan agobio y estrés.
  4. Marca tus propios propósitos. Cuando no tienes claros tus objetivos y metas en la vida, alguien los marcará por ti. Por tanto, si no quieres terminar viviendo la vida que los demás quieren para ti y dejar que sean ellos quienes dicten tus decisiones, debes delimitar cuáles son tus propósitos y ceñirte a ellos. 
  5. Aprende a decir “no”. Cuando te liberas finalmente de los miedos y las presiones sociales y dices “no”, no solo te alivias la carga de responsabilidades que llevas sobre la espalda sino que adquieres la seguridad necesaria para tomar las riendas de tu vida, aceptando lo que realmente te apetece hacer y rechazando todo aquello que no te aporta nada.