Es un malware que cifra archivos, añade una extensión aleatoria de 8 caracteres y crea un archivo con instrucciones para acceder al sitio donde pagar el rescate
Un ser humano no es un ordenador, ni un avión. Que una tecnología deje de resultar rentable no puede provocar dramas como el originado tras la bancarrota de una empresa
WhatsApp se ha convertido en una trampa de conejos para muchas víctimas de los ciberdelincuentes. Hay estafas para todos los gustos y también vulnerabilidades.
En el mes de mayo, los usuarios de este sistema dejarán de recibir soporte. Microsoft ha decidido utilizar la actualización para hacer machine learning.