Rusia prepara ataques disruptivos contra la industria energética y financiera de EE.UU.

Rusia podría sacar toda su ciberartillería contra empresas estadounidenses próximamente para presionar a la administración Biden.

Alberto Payo

Periodista

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Vista de una torre eléctrica.
Vista de una torre eléctrica.

Los servicios de inteligencia americanos llevan semanas advirtiendo a las empresas del país y a otras compañías europeas de que Rusia iba a iniciar una importante campaña de ciberataques, antes incluso de que Putin invadiera a Ucrania. 

Sin embargo, parece que hasta ahora sus ciberamenazas han tenido un perfil bajo y no han sido demasiado agresivas. Esto podría cambiar en breve, segun publica el medio Foreign Policy, de acuerdo a personas familiarizadas con la materia. Putin podría dejar de contenerse en el espacio de las amenazas cibernéticas. 

El diario explica que Moscú se está preparando para ejecutar "ciberataques destructivos y disruptivos" que podrían apuntar a las industrias energética y financiera estadounidense. Serían una manera de castigar a la administración Biden por su apoyo a Ucrania y una respuesta del Kremlin a las fuertes sanciones contra Rusia. 

Estos incidentes supondrían un medio que usaría el Kremlin para presionar a EE.UU. y otros países de la OTAN por su apoyo a Ucrania sin provocar un conflicto de mayores dimensiones o hacer que la guerra se expandiera también a la alianza.

El pasado mes de marzo el FBI ya advertía a media decena de compañías energéticas que algunos equipos usando direcciones de Internet rusas habían estado escaneando sus redes, como un posible signo de futuros ciberataques. 

El objetivo es infligir dolor de una manera en que puedan evitarlo”, ha comentado Nick Biasini, jefe de divulgación de Cisco Talos, el brazo de inteligencia de amenazas de la compañía de seguridad cibernética. “Van a buscar dónde pueden infligir daño, dónde realmente puedan causar dolor”, añade. 

¿Están las empresas preparadas?

No obstante, la mayoría de estas empresas se han estado preparando durante años para una variedad de escenarios que Rusia podría implementar, incluidos los ataques de denegación de servicio para cerrar las redes al inundarlas con tráfico, la desfiguración de los sitios web gubernamentales y corporativos, o los ataques de ransomware que incautan y bloquean los servidores hasta sus operadores arrojan dinero en efectivo, como el ataque de 2021 que destruyó el oleoducto Colonial en el sureste de los EE.UU durante casi una semana.

En cualquier caso, los expertos comentan que Rusia no necesita alcanzar grandes objetivos de EE.UU. para tener un buen impacto. La idea puede ser hacer pequeñas heridas a la administración Biden, pero que estén por debajo del umbral en el que Joe Biden y su equipo puedan tomar graves represalias en el ámbito cibernético.