Anonymous ataca a Nestlé por no abandonar sus operaciones en Rusia

El grupo de hacktivistas habría liberado 10 GB de información sensible perteneciente a la compañía suiza.

Alberto Payo

Periodista

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Nestlé no termina de tener clara su estrategia comercial ante la invasión rusa de Ucrania.
Nestlé no termina de tener clara su estrategia comercial ante la invasión rusa de Ucrania.

Anonymous sigue con su particular cruzada para apoyar a Ucrania y combatir a Rusia a su manera. Recientemente declararon "la guerra" a aquellas compañías que continúen operando en Rusia "pagando impuestos que van al presupuesto del régimen criminal del Kremlin". 

A raíz de este posicionamiento el colectivo de hackers ha decidido atacar a Nestlé por su actitud ambigua frente al conflicto. Debido a que la empresa suiza seguía operando en Rusia, han decidido entrar en sus sistemas y filtrar 10 Gb de información sensible. 

Los datos que se han revelado incluyen emails de la compañía, passwords y datos relacionados con clientes de la casa, muchos de ellos comerciales. 

En un principio Nestlé aseguraba que iba a seguir operando en Rusia porque no obtenía beneficios de sus operaciones allí. 

Anonymous ha amenazado a las empresas internacionales que siguen operando en territorio ruso dándoles 48 horas. Los siguientes objetivos en su lista podrían ser Hayatt, BBDO, Raiffeisen Bank, IPG, Cloudflare o Citrix.

Un giro de los acontecimientos

A las pocas horas de producirse el ciberataque, Nestlé ha enviado un comunicado en el que asegura que suspenderá la "gran mayoría" de sus ventas en Rusia, incluyendo las barritas de chocolate KitKat y el Nesquik. También ha hecho lo propio con productos para mascotas y café. 

La compañía suiza ya había detenido las importaciones y exportaciones no esenciales a Rusia y también había parado toda la publicidad y la inversión de capital en el país, señalando que donaría las ganancias de Rusia a los esfuerzos de ayuda de Ucrania.

Un portavoz de Nestlé ha contabilizado en 1.700 millones de francos suizos (unos 1.658 millones de euros) las ventas que Nestlé tuvo en Rusia el año pasado. 

Recientemente el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, había acusado a la empresa de no haber hecho lo suficiente para estar a la altura de su eslogan "Buena comida, buena vida" al continuar operando en Rusia.

Desde que Vladimir Putin invadió Ucrania el pasado 24 de febrero más de 400 empresas se han retirado de Rusia.