No cabe duda del gran trabajo que realizan nuestras Fuerzas Armadas por hacer de la Cultura de la Paz una realidad, al tiempo que garantizan la Seguridad y la Defensa de todos los españoles. Una labor que debemos reconocer siempre, también en fechas señaladas en el calendario como lo es el Día de las Fuerzas Armadas.
En el marco de esta celebración, quiero profundizar en la importancia de garantizar una formación innovadora, de vanguardia y 100% adaptada a las necesidades de estos profesionales, que velan día a día por nuestro bienestar. Y es que nuestros militares hacen frente a un sinfín de obligaciones profesionales: guardias, traslados o misiones en el extranjero, entre otros. Estas actividades no les permiten permanecer durante largos periodos de tiempo en un mismo destino. Por este motivo, ofrecerles la posibilidad de formarse mediante una metodología flexible, que les facilite estudiar desde cualquier parte del mundo y mediante cualquier dispositivo, resulta fundamental.
Pero además de comprender sus necesidades, garantizar la calidad y la especialización de estos profesionales es prioritario para su desarrollo profesional. A inicios de 2023, el Ministerio de Defensa publicó más de 3.400 plazas de Tropa y Marinería en la escala básica. Aquellas personas que obtengan una de esas plazas adquirirán un compromiso con las Fuerzas Armadas renovable hasta los 45 años. Pero después, si no han conseguido una plaza de permanente o han opositado para una plaza de ascenso, deberán abandonar la institución para pasar a la reserva activa.
En este marco, la formación profesional representa una oportunidad única para poder progresar en su carrera militar e incluso, en el caso de que prefieran abandonar la carrera militar, para asegurarse una formación que facilite su empleabilidad en el futuro. Así, los programas de Formación Profesional especializados en áreas como Sanidad, Comercio, Seguridad y Medioambiente, Transporte y Mantenimiento de Vehículos, Administración y Gestión, Edificación y Obra Civil, así como Informática y Comunicaciones, son claves.
Y es que la obtención de un título de FP puede ayudar a que los miembros de las Fuerzas Armadas incrementen sus posibilidades de acceder a la permanencia dentro de su carrera militar. Y, además, sus opciones en las oposiciones de ascenso o al desempeño profesional en el sector civil, más allá del ámbito de la seguridad.
Por este motivo, no debemos olvidar la importancia de formar en ámbitos estratégicos a las personas que, día a día, velan por nuestra seguridad, facilitándoles un futuro donde la empleabilidad sea la protagonista, tras años de fiel servicio a todos los ciudadanos españoles.