Una patrulla de la Ertzaintza, de la comisaría de Getxo, se movilizó hasta la Ría de Bilbao el pasado sábado 24 de diciembre, tras recibir un aviso de un ciudadano que afirmó haber visto un cuerpo en el agua.
Una lancha de la Cruz Roja logró sacar el cuerpo sin vida, que llevaba amarradas dos pesas de dos kilos para que permaneciera sumergido en el agua. Las pesquisas de la Policía Judicial de la Guardia Civil y la Ertzaintza determinaron que se declare el hecho como un homicidio.
Según el Diario Vasco, la víctima es una mujer transexual de 40 años. De tez blanca, cabello corto y moreno y de alta estatura. En el momento en el que fue encontrada estaba vestida con un abrigo de plumas, tejanos y botas de marca.
El asesino aún no ha sido identificado
La persona que arrojó a la mujer al agua pegó las pesas con cinta al cuerpo de la víctima para encubrir el homicidio.
La autopsia realizada en el Instituto de Medicina Legal de Bilbao reveló que no había agua en sus pulmones, lo que confirma que cayó sin vida a la ría, y que la muerte fue por asfixia y no por ahogamiento. También se descubrió que el cuerpo sin vida de la mujer permaneció sumergido entre cuatro y cinco días en el agua.
La Ertzainza trabaja junto a la Guardia Civil en la identificación de la víctima, que no llevaba documentación ni objetos personales. Se han extraído muestras de ADN y sus huellas dactilares para cotejarlas con denuncias de desaparición.