Radares pedagógicos para aumentar la seguridad en las travesías

Los temidos radares no solo sirven para poner multas, también para evitar accidentes y aprender cómo mejorar determinados tramos de las carreteras.

Dolores Figueroa

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Radar de Velocidad Allepuz (Gobierno de Aragón)
Radar de Velocidad Allepuz (Gobierno de Aragón)

El Departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón ha puesto en marcha  la instalación de radares pedagógicos en ocho municipios para aumentar la seguridad vial en las travesías. Los radares avisan al conductor sobre la velocidad a la que circula el vehículo adicionalmente, y se utilizan para "recoger datos como la velocidad media, cantidad de tráfico, distribución y frecuencia",  según ha manifestado el director general de Carreteras de esta comunidad autónoma, Bizén Fuster. 

Esta información puede ser rentabilizada para realizar un análisis posterior sobre la situación del tramo y, por supuesto, para tomar otras medidas adicionales y así reforzar la seguridad en las travesías. Los tramos urbanos de las carreteras son protagonistas de un número elevado de accidentes. En ellas se concentran peatones, vehículos, intersecciones, accesos y es un hecho probado que no siempre se respetan los límites de velocidad.

Una herramienta extraordinariamente útil para la disminución de la velocidad y su control que puede salvar muchas vidas

Fuster ha indicado que "tras analizar las peticiones de los ayuntamientos y el tráfico de las travesías, hemos decidido afrontar la instalación este año de estos elementos de seguridad en Sena, Serraduy, Mediano, Oliete, Aguaviva, Pancrudo, Alcalá de la Selva y Muel".

El importe total de la actuación es de 48.182 euros. La empresa PROSEÑAL SLU llevará a cabo los trabajos de instalación en las próximas semanas del mes de diciembre. El director de Carreteras ha añadido que"se trata de una medida muy eficiente y cuyo coste es relativamente bajo".

Los radares pedagógicos son una herramienta muy útil para la reducción de la velocidad en las travesías ya que informan sobre la velocidad de circulación de una forma llamativa a través de una pantalla luminosa y usando un código de colores -verde, ámbar y rojo-, a modo de advertencia.