Este martes se ha producido un tiroteo en la escuela 175 de la ciudad rusa de Kazán, la capital de la República de Tartaristán, que se ha saldado con la vida de al menos 8 personas, siete estudiantes y una profesora, según han indicado las autoridades rusas rebajando el número de fallecidos de las primeras informaciones. De acuerdo con el Ministerio de Sanidad de Tartaristán, 21 personas han resultado heridas, tres adultos y el resto niños, que han sido trasladados a diferentes hospitales.
Aunque en un principio diversas fuentes apuntaban que los autores del ataque habían sido dos personas, las autoridades locales han precisado que solo fue uno, que ha sido detenido e identificado como Ilnaz Galiáyev, de 19 años y exalumno del colegio que al parecer tenía mala relación tanto con los profesores como con sus compañeros.
El suceso ha tenido lugar en el primer día del regreso a la actividad de los centros de trabajo e instituciones rusas, tras una fiesta nacional de diez días en conmemoración del Día del Trabajo y del 76º aniversario de la derrita de la Alemania nazi por parte de la Rusia soviética en la Segunda Guerra Mundial. En el momento del suceso, había 714 niños en el colegio y 70 empleados, 52 de ellos profesores.
"Hoy ha ocurrido una gran tragedia para nuestra república y nuestro país", ha lamentado el presidente de Tatarstán, Rustam Minnikhanov, en declaraciones a la canal de televisión Rusia-24.
El brutal ataque: Tiroteo y explosión
Tal y como explica el medio local Business-gazeta.ru citando a varios testigos de lo ocurrido, el asaltante entró por la puerta principal del colegio disparando y, justo después, se oyó una explosión.
Las imágenes difundidas por la televisión muestran a decenas de personas en el exterior del centro educativo, rodeado por la policía y los bomberos. "Hemos escuchado una explosión dentro del recinto de la escuela, vemos mucho humo", indicó un testigo, citado por Ria Novosti. "Estaba en clase, oí una explosión y luego disparos", confirmó una profesora a TASS.
En las redes sociales también están circulando vídeos del desgraciado incidente en los que se ven los daños materiales que habría provocado la explosión o a varios estudiantes huyendo por las ventanas.
Kazán, ubicada a unos 800 km de Moscú, es conocida como "la tercera capital de Rusia" y la ciudad cuenta con más de 1,2 millones de habitantes que representan la región más grande mayoritariamente musulmana de Tartaristán.
"Por decisión del presidente de la república el 12 de mayo se decreta día de luto en Tartaristán", ha declarado la portavoz de la presidencia regional, Lilia Galimova.
El fiscal de Tartaristán, Ildus Nafikov, se ha trasladado al lugar del suceso de cara a la apertura de una investigación sobre el mismo.
Vladimir Putin ha ordenado una revisión inmediata de los permisos de armas
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, también ha reaccionado a este trágico incidente. Por un lado, ha trasladado sus "profundas condolencias" a las familias de los fallecidos en el tiroteo, según ha informado en rueda de prensa el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov. Por otro, ha deseado una pronta recuperación a todos los heridos y ha encomendado al Gobierno ruso proporcionar "toda la ayuda sanitaria y psicológica necesaria" para los niños afectados por el ataque, así como apoyo a sus familias. En este sentido, ha pedido a ministros de Salud y Educación, Mijail Murashko y Sergei Kravtsov respectivamente, que se desplacen "de inmediato" a Kazán.
Además, Putin ha ordenado al comandante de la Guardia Nacional, Víctor Zólotov, "elaborar con urgencia una nueva normativa sobre los tipos de armas que se pueden vender a la población", ha afirmado Peskov.
"Se ha dado una instrucción para que haya una nueva reglamentación sobre el tipo de armas que pueden estar en circulación civil, en manos de la población, teniendo en cuenta el tipo de armas pequeñas utilizadas por el tirador", ha explicado el portavoz del Kremlim.