El oro es siempre oro, allá donde se encuentre. Da igual si es en productos de joyería, en adornos o engastado en complementos. Los amigos de lo ajeno van siempre un paso por delante, e incluso saben identificar las mejores piezas en el mercado erótico, donde también el lujo marca diferencias entre productos de primera clase y otros que se limitan a cumplir con la funcionalidad para la que fueron concebidos.
Como decíamos, el oro es siempre oro, y esa máxima ha debido estar muy presente en la cabeza del grupo de atracadores que, en la pasada madrugada, ha irrumpido en las instalaciones de la mayor empresa distribuidora de juguetes eróticos de España, Dreamlove, en el Parque Logístico de Carmona (Sevilla), para perpetrar un robo contra la joya de la corona: una selección de vibradores de oro y de acero, cuyos precios de venta oscilan entre los 16.000 y 17.000 euros los de oro de mayor tamaño, y los 2.000 y 3.000 euros los de acero, tal y como ha publicado la Agencia Efe.
En total han sido siete las piezas sustraídas por un grupo integrado, al menos, por las tres personas con los rostros cubiertos que han grabado las cámaras de seguridad, así como un posible cómplice que se sospecha pudieran tener en el interior o algún miembro más que aguardaba en el vehículo empleado en el robo, estacionado en una zona próxima.
Este hecho, además de que los atracadores, antes de acceder a las instalaciones de Dreamlove por la puerta principal, hayan cortado la calle con vallas y el cableado de las farolas para dejar la calle a oscuras, hace pensar que se trata de un equipo altamente especializado que recuerda al que grandes producciones de Hollywood retrata en filmes como Ocean´s Eleven, aunque con menos glamour que los grandes golpes perpetrados en casinos o grandes museos.
En cuanto al futuro del botín, el consejero delegado de esta empresa sevillana, Mario Romero Molina, no tiene claro que sea fácil de colocar en el mercado, “por tratarse de ejemplares muy escasos y fácilmente identificables”.
El caso, ya denunciado, está abierto en espera de las averiguaciones de la Policía puedan dar con los ladrones y hallar los consoladores de oro para que sean puestos de nuevo en el mercado.
Dream Love, como publica la Agencia Efe, opera desde hace pocos meses en el Parque Logístico de Carmona, en una sede construida de nueva planta con 5.000 metros cuadrados. Con una inversión de tres millones y medio de euros, esas instalaciones, con almacenes robotizados, han permitido a esta empresa incrementar sus 18 millones de facturación anual. En los últimos cinco años, ha estado creciendo un 40% cada año.
No es el primer caso de estas características
Pero este no es el primer caso de estas características que se dan en nuestro país, sino solo el más reciente. Y es que en febrero de 2018, una tienda de Barcelona denunció ante los Mossos d'Esquadra el robo de tres juguetes eróticos bañados en oro de 24 quilates por valor de 20.000 euros.
En aquel caso las cámaras de seguridad del establecimiento captaron los hechos también de madrugada, y dejaron constancia de cómo el ladrón recurrió a otro masajeador erótico para romper la estantería de cristal donde estaban los objetos dorados porque no llevaba herramientas consigo.
También entonces, el director de ventas de la marca de los objetos eróticos cuestionó que el ladrón pudiera sacar provecho del botín, ya que "es muy complicado fundir las piezas o hacerlas funcionar sin sus correspondientes cargadores".