Un coleccionista de NFTs sufre el robo de un hacker por valor de 2,2 millones de dólares

Todd Kramer, coleccionista de tokens no fungibles de Bored Ape Yacht Club, experimentó un ataque de phishing.

Alberto Payo

Periodista

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Concepto criptográfico nft.
Concepto criptográfico nft.

Los NFT o token no fungibles están en plena burbuja y los ciberdelincuentes no están perdiendo la ocasión de usar sus herramientas para robar, estafar y hacerse con estos activos digitales únicos cuyo valor supera en ocasión la de millones de dólares.

Un coleccionista de NFT neoyorquino llamado Todd Kramer sufrió hace unos días un robo de varias unidades cuya valoración estaría calculada en 2,2 millones de dólares. 

Según explicaba a través de Twitter, un ciberdelincuente le había sustraído ocho ejemplares de su colección de Bored Ape Yacht Club (BAYC), siete de Mutant Ape Yacht Club (MAYC) y un Clonex.

Para los no iniciados, Bored Ape Yacht Club es una colección de 10.000 obras de arte únicas con simios que lucen distintos accesorios e insignias. En este momento son bastante solicitadas en este lucrativo mercado. 

Bored Ape Yacht Club fue creada por cuatro amigos conocidos por sus seudónimos: Gordon Goner, Gargamel, No Sass y Emperor Tomato Ketchup. La colección se lanzó el 30 de abril de 2021 y desde entonces ha sido reemplazada por dos spin-offs: la citada de Mutant Ape Yacht Club (MAYC) y Bored Ape Kennel Club.

Estos 'monos' son tan conocidos que algunas piezas se han vendido por millones de dólares y tienen famosos propietarios como el presentador Jimmy Fallon o la estrella de la NBA Steph Curry.

Todo comenzó con un ataque de phishing

Kramer explicaba que el origen del robo podría haber estado en un ataque de phishing. Todo comenzó cuando hizo click en un enlace que daba el pego como una aplicación de NFT descentralizada. 

La víctima también compartió que dos personas que habían comprado dos los NFTs robados sin saber su procedencia se los devolvieron al conocer lo sucedido. Además, Open Sea, la conocida plataforma de compraventa de estos tokens habría congelado los activos robados para asegurar sus propiedades digitales.