El Círculo de la Sanidad, cuyos asociados dan servicio al 80% de los hospitales y centros sanitarios públicos españoles, rechaza la Ley de Equidad Universalidad y Cohesión del Sistema Nacional de Salud (SNS), que ha salvado su primer trámite parlamentario, y advierte que, “sin el sector privado, el sistema sanitario colapsará”. Así lo ha manifestado Ángel Puente, presidente de la asociación.
El Círculo de la Sanidad reclama responsabilidad y sentido de Estado a los partidos políticos en un momento, advierten, en el que la colaboración público-privada “es más necesaria que nunca”. “Los hospitales están al límite de su capacidad y las listas de espera marcan cifras récord”, señala, e insiste en que la nueva ley, lejos de resolver los problemas del Sistema Nacional de Salud, amenaza su sostenibilidad. “Sin esta colaboración es imposible que resista”, añade.
“Por encima de la ideología debe prevalecer el bien de la ciudadanía”, señala el presidente del Círculo de Sanidad, que manifiesta su preocupación por las implicaciones en la calidad de la asistencia a los pacientes que la norma pueda provocar. La colaboración público-privada ha demostrado ser una herramienta muy eficaz para hacer frente a las carencias del Sistema Nacional de Salud, y un ejemplo de ello, recuerda, fue “el esfuerzo conjunto de gestión que se realizó durante la pandemia”.
Un ataque al sector privado
El Círculo de la Sanidad ve en la nueva ley de equidad un ataque al sector privado pese a ser una pieza clave de un modelo de gestión ejemplar que aglutina 20 años de consenso. Prueba de ello es que todas las Comunidades Autónomas, indistintamente de su color político, mantienen conciertos con la privada. "Las leyes -subraya Ángel Puente- deben estar por encima de ideologías políticas, ofrecer soluciones y resolver los problemas de los ciudadanos, no agravarlos".
Las empresas del Círculo de la Sanidad proveen a las administraciones sanitarias de servicios tan variados como el de la logística sanitaria y biosanitaria, la producción de gases de uso médico, gestión de hospitales, electromedicina, ingeniería, consultoría, farmacología, tecnología médica avanzada y muchos otros, y son una parte esencial para el funcionamiento de la infraestructura sanitaria pública española.