Link, el eléctrico monoplaza español que puede cambiar la movilidad del futuro

Es un coche accesible y autónomo capaz de transformarse en segundos para ser usado como transporte público.

Gonzalo Díaz Bonet.

Especialista en Tecnología y Sostenibilidad.

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LINK, el electrico monoplaza del futuro
LINK, el electrico monoplaza del futuro

Link es un vehículo individual, esférico, 100% eléctrico, capaz de emparejarse con sus clones para remolcar a una, dos o tres otras 'células de movilidad' idénticas. Este prototipo futurista le ha valido al español Luis Muñoz para ganar el prestigioso certamen Movin´On Challenge Design, cuyo objetivo es la búsqueda de soluciones de movilidad para los próximos años.  

Debido a su pequeño tamaño, Link reduce la congestión de vehículos individuales en el centro de las ciudades, así como su consumo de energía. Además, es un coche autónomo, por lo que no requiere conductor. La idea de Muñoz es que haya estaciones repartidas por toda la ciudad, y que pueda hacer trayectos programados, como por ejemplo desde una estación hasta la plaza del ayuntamiento. 

De esta manera podría llevarlo hasta un niño, y al ser eléctrico necesitaría una batería para cargarse, aunque una pequeña, ya que estamos hablando de desplazamientos urbanos, y con 50 kilómetros de autonomía sería suficiente, ya que en ningún caso el monoplaza va a salir de la ciudad y, además, en cada estación de enganche esa batería se auto-recarga. El hecho de tener una batería pequeña reduce también el peso del coche, lo que implica un menor consumo. 

Muñoz cree que esta tecnología podría estar lista en cuestión de diez años, y realmente piensa que la movilidad del futuro será muy parecida a lo que supone este proyecto. Además, está convencido de que el coche privado desaparecerá de las ciudades, aunque no de las zonas rurales, de forma que en las grandes urbes se necesitará otro tipo de coche como este prototipo tan futurista. 

Con este planteamiento, el español ha sido distinguido en el certamen organizado por Michelin, desarrollado entre el 1 de septiembre de 2022 y el 1 de marzo de 2023, que ha contado con un prestigioso jurado internacional. Puesto en marcha en 2001, el Michelin Challenge Design, que se convirtió en el Movin´On Challenge Design en 2020, fomenta y premia el diseño creativo en todo el mundo. Desde su creación ha recibido más de 16.000 candidaturas de 134 países. 

“El diseño es un elemento clave en la transformación de la movilidad. El ecosistema Movin´On se centra en desarrollar soluciones a los retos de la movilidad que sean seguras, eficientes, accesibles y respetuosas con el medio ambiente. Diseñando soluciones que mejoren la experiencia del usuario final, podemos mejorar la vida de los ciudadanos del mundo a través de la movilidad”, afirma la presidenta del Movin’On Design Challenge, Kimbrelly Kegler. 

Trayectoria del ganador 

Tras su formación de Delineación en Formación Profesional, Muñoz cursó en la una Ingeniería Técnica de Diseño Industrial, para posteriormente ganar un concurso de diseño de coches cuyo premio era cursar el Máster de Diseño de Automóviles de la Universidad Politécnica de Valencia. Actualmente trabaja en una empresa de ingeniería informática que se llama Noves Tecnologíes Quatre, donde hacen plataformas y programas de software a medida, apps, páginas web…etc. 

La idea de participar en el concurso de Michelin le surgió de sus propias inquietudes, que le han llevado a presentarse a numerosos concursos durante el año; y como estudió diseño gráfico, se ha venido presentando a concursos que le han parecido interesantes pero, sobre todo, que constituyen un desafío para él, ya que le gustan los retos. Uno de estos retos fue el que le llevó a presentarse al premio Movin'On de Michelin, al que ya se había presentado en 2017. 

El concurso consistía en diseñar un coche de las 24 Horas de Le Mans para el año 2050, es decir, había que diseñar un coche para el futuro. En dos semanas montó el diseño en 3D y lo renderizó, luego tardó una semana más en montarlo en Photoshop. 

La idea propuesta era que cada rueda tenía un sistema de dirección y un motor independiente, de forma que el coche pudiese girar sobre sí a baja velocidad. Pero era un coche para divertirse, para pasarlo bien, ya que, por ejemplo, si llovía no podías usarlo. 

En cualquier caso, la idea de tener un coche monoplaza para moverte siempre le ha gustado a Muñoz, y en el máster también ideó un coche monoplaza que se enganchaba uno con otro, y de la suma de ambos proyectos ha salido Link, aunque en este caso quería ir más allá, y crear un coche para todos los públicos, incluyendo a personas con movilidad reducida, como su mujer, que va en silla de ruedas.