Miguel Angel García

Opinión

Eurovisión 2022: raíces ucranianas frente a ciberataques rusos

Director de Escudo Digital

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Kalush Orchestra, ganadora de la final de Eurovisión 2022.

Cada uno se expresa en el lenguaje que mejor domina, y eso es algo que más allá de las palabras grandilocuentes se aprende en los gestos, en los actos del día a día. Rusia, liderada por su presidente absoluto, Vladimir Putin, ha encerrado en algún almacén del Kremlin el inmenso patrimonio artístico de ese gran país en torno al cual ha tejido su inmensa tela de araña y se ha entregado ciegamente a las notas arcaicas del sometimiento y la destrucción. Esa es su canción. 

Ucrania, a diferencia del país que niega su existencia, ha aprovechado la oportunidad que le ha brindado Eurovisión para homenajear a sus madres y a las raíces por medio de la banda Kalush Orchestra, que con su tema Stefania ha conseguido el aplauso unánime de todos los países que componen esta fiesta internacional en la en el ambiente se percibieron otros protagonistas además de la música. Los ecos de los resultados conseguidos hablan por sí mismos de quien es quien, cómo se expresa mejor cada uno en estos momentos, y cuál es el lugar que hoy por hoy cada uno ocupa ante los ojos de Europa y gran parte del mundo. 

Esperemos que para la próxima edición de este festival, que debería tener a Ucrania como anfitrión, todos hayamos despertado de esta pesadilla y que el pueblo ruso pueda volver a hacer sonar sus voces sobre un escenario compartido con el resto de participantes y que no, como ayer sucedió, trate de expresar su odio hacia el presunto complot nazi que toda Europa ha orquestado contra Moscú y que solo ve el "visionario" Putin y sus perritos falderos de Biolorrusia o Chechenia.

Ayer Rusia intentó boicotear la final de Eurovisión, tal y como informaron las autoridades italianas, las cuales hicieron público un fallido intento de ataque informático organizado por grupos de hackers afines a Rusia. Un ataque que no fue a más porque, según el comunicado recogido por la agencia ANSA, "técnicos y policías especialistas del Centro Nacional de Protección contra los Delitos Informáticos a Infraestructuras Críticas (CNAIPIC) de la Policía neutralizaron los ciberataques ataques del colectivo Killnet y su rama Legion".

De acuerdo con la nota, los agentes actuaron a partir de análisis de la información obtenida de los canales de Telegram del grupo prorruso, así como análisis de "datos relativos a direcciones IPs comprometidas, gracias a los cuales los ataques fueron 'mitigados y repelidos".

Y por si esto fuera poco, hoy mismo, como informa Europa Press, el asesor de la Alcaldía de la asediada ciudad ucraniana de Mariúpol, Petro Andriushchenko, ha denunciado que Rusia ha lanzado bombas de fósforo blanco contra la acería de Azovstal poco después de la victoria del país en el certamen.

Esto es lo que hay a día de hoy, y así se expresan cada uno de los intérpretes que forman parte de esta alegoría musical en la que los hackers rusos han intentado que prevalezca el lenguaje del acoso mientras que la hábil Ucrania, como David con su honda, ha aprovechado para escarbar en sus raíces y en mostrárselas a una Europa que se mostró más dispuesta a compartirlas que nunca. 

Los otros dos grandes ganadores fueron Sam Ryder, el representante británico que ha aprobado con nota el nuevo lugar del Reino Unido respecto a la Unión Europea, y Chanel, una española que a pesar de las críticas que debió soportar en las fases previas, ha descifrado con una sencilla fórmula el código europeo que nuestro país ha tratado infructuosamente de resolver durante tanto tiempo.