Pedro Sánchez "no tiene prisa" por acortar los plazos y prevé que saldrá reelegido en otoño una vez que Alberto Núñez Feijóo haya fracasado. Sánchez irá a la investidura y no contempla el escenario de una repetición electoral, pero la clave serán los tiempos.
La estrategia del PSOE pasa por dejar que el foco se instale en el Partido Popular y que "Feijóo se cueza a fuego lento con Vox".
"Apuesta por dejar enfriar los resultados unas semanas antes de abrir negociaciones y que Feijóo 'se cueza en su propia salsa'".
Los socialistas entienden que el líder popular se presentará a la investidura, pero apuestan por la idea de que no logre resistir al frente de su formación. Moncloa ve a Feijóo herido y el PP, en cambio, cree que la sedición desangrará a Sánchez.
Por otro lado, los barones del PP –no olvidemos que para ellos Feijóo también es un barón– quieren que Sánchez se queme en una legislatura a la que no dan ni media vida. Lógicamente, antes tiene que prosperar, con el Senado en manos del PP, con el PSOE teniendo que pactar todas y cada una de las leyes que quiera sacar adelante con los independentistas y con una guerra "civilista" que ya se empieza a fraguar entre Sumar y Podemos.
La Asamblea Nacional Catalana (ANC) reclama a Junts y ERC que no invistan a Pedro Sánchez para que pueda repetir como presidente del Gobierno: "No salvamos ninguna patria que no sea la catalana". La presidenta de la entidad, Dolors Feliu, también ha señalado que esta negociación debe incluir la independencia. "Si no, elecciones, unas detrás de otras".
¿Cuál es la baza de los barones del PP? La capacidad legislativa de las Comunidades Autónomas.
Si contabilizamos todas las normas de la Administración Central (las leyes orgánicas, decretos-leyes, etc.), las normas de las CC.AA. (leyes regionales, decretos legislativos regionales, etc.) y la regulación local (a nivel provincial y municipal, incluyendo decretos forales, ordenanzas municipales, etc.) se llega a un cómputo de 392.287 normas publicadas en el período democrático (1979-2022). Y, si nos fijamos a partir del año 1982, se ha invertido el peso de la capacidad normativa y regulatoria.
Si el PSOE quiere "cocer" a Feijóo en un proceso de negociación para constituir Gobierno, el PP quiere "quemar" a Sánchez por no poder ejercer el Gobierno. Lo único es que nosotros somos quienes pagamos la factura del gas.