Anteayer, día 1de marzo, tuvo lugar la concentración de un grupo de trabajadores a la entrada de la prisión de Alcalá Meco, ACAIP-UGT y CSIF como medida de protesta ante lo que definen como "una situación insostenible debido a los gravísimos problemas de escasez de personal penitenciario que llevamos sufriendo y denunciando desde hace ya demasiado tiempo, y la inoperancia a la hora de aportar soluciones por parte de las autoridades penitenciarias. La gota que ha colmado el vaso, y que ha originado un malestar generalizado en la plantilla del centro, ha sido la decisión arbitraria y totalmente injusta adoptada por la Dirección del centro de suspender permisos de funcionarios, previamente autorizados desde hace meses y a dos días de un puente escolar, lo que ha supuesto a dichos trabajadores un importante problema a la hora de conciliar su vida familiar, algunos de ellos con viajes programados con antelación y sin margen alguno para poder solucionar dicha situación".
Además de todo ello, se han suspendido todos los permisos y licencias por periodo indefinido, lo que afecta a las vacaciones de Semana Santa, sin que se pueda saber si se van a poder disfrutar y sin margen para planificar las mismas. Este malestar e indignación por parte de la plantilla se viene larvando desde hace ya tiempo, debido a que Madrid 2 cuenta con un déficit de funcionarios de aproximadamente 90 efectivos, en relación a lo que contempla la actual RPT del centro.
La plantilla de funcionarios de prisiones, cada vez más envejecida
Y ello se trasluce que durante la mayor parte del año, algunos de los módulos de la prisión queden a cargo de un solo funcionario que tiene que hacerse cargo en solitario con un número considerable de internos, con la merma que supone en cuanto a la seguridad, tanto de internos como de los propios funcionarios, y la carga de trabajo diaria. Ya hemos hablado en alguna ocasión en Escudo Digital de la baja tasa de reposición de una plantilla cada vez más envejecida.
Los sindicatos ACAIP-UGT y CSIF, convocantes de esta concentración, vienen años denunciando esta lamentable situación sin que las autoridades penitenciarias tomen medidas contundentes para abordar de una forma efectiva este problema, haciendo gala de una desidia ante sus trabajadores que viene a rayar en lo temerario, poniendo en peligro la seguridad, tanto de internos como de trabajadores y cercenando los derechos laborales de estos últimos.