Es conocido como el Rambo de la Cerdanya, tiene un trastorno conductual, y se ha hecho muy famoso. Marti Cots Saleta es un delincuente muy peligroso que no pudo ser juzgado en el 2020 por sus problemas mentales. Ha pasado cuatro décadas de su vida delinquiendo y entrando y saliendo, o escapándose, de la cárcel o de centros psiquiátricos. Con un grado de discapacidad del 65%, inteligencia límite y esquizofrenia paranoica, Martí Cots actualmente se encuentra en prisión preventiva en el centro penitenciario de Brians, donde ha protagonizado una nueva fuga, pero de celda.
Con los hierros de una cómoda estuvo tres horas excavando para poder hacer un agujero en su celda con la intención de pernoctar en la que ocupaba una presa de 22 años que se encontraba ingresada en la habitación continua. El ala de la cárcel donde ocurrieron los hechos fue la Unidad de Hospitalización Psiquiátrica Penitenciara (UHPP)) de la cárcel de Brians 1 de Sant Esteve Sesreovies en el Bajo LLobregat.
Hace dos años dijo que iba a descuartizar a los mossos que lo detuvieron y al forense
Según ha publicado el medio catalán La Valira Cots consiguió su propósito, pasar toda la noche en la celda con la presidiara, una mujer de 22 años, también enferma psiquiátrica, como él. Los enfermeros que se encontraban de guardia se sorprendieron de los ruidos que se oían, pero pensaron que había tenido un pequeño brote fruto de su complicado estado mental. Sufre de esquizofrenia, entre otras enfermedades mentales.
El preso al que se le atribuye una inteligencia por debajo de lo común que sus hechos, sin embargo, no demuestran. Desmontó un enchufe, y como las paredes de las celdas son de ladrillo convencional, comenzó a cavar.
El Rambo de la Cerdanya debería haber sido juzgado la semana pasada en el Juzgado de lo Penal IV de Girona por el atraco a mano armada con 17.000 euros de botín en un hotel en la estación de esquí de Masella (la Cerdanya) , acaecido el 22 de diciembre de 2018. La constatación forense de su estado, muy agresivo y sumamente inestable, provocó que se suspendiera la vista.
Cots Saleta tiene 52 años. Su última detención tuvo lugar en Andorra a raíz del golpe en el hotel, y estuvo un año y medio en prisión en Perpiñán antes de ingresar en la prisión catalana.
Hay que recordar que en febrero del 2020 (después de que Andorra y Francia lo dejaran libre por las causas que tenía), al ser puesto a disposición del juzgado de Puigcerdà por el asalto a Alp, dijo que iba a matar a los mossos y al forense, y pensaba descuartizarlos.