El Gobierno de España prepara la aprobación de un nuevo Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) sobre microchips y semiconductores dotado con 11.000 millones de euros de inversión pública, según ha anunciado este mismo lunes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
"Los semiconductores son un elemento básico de todos los sectores energéticos y adquieren una importancia geoestratégica mundial en un contexto de transformación digital", ha resaltado Sánchez durante su intervención en la segunda edición del 'Wake Up, Spain! Aprendizaje, crecimiento y sostenibilidad en la Europa solidaria', un simposio organizado por El Español, Invertia y D+I.
El presidente ha defendido que España no va a perder la carrera de la tecnología avanzada, sino todo lo contrario. "El Gobierno quiere que nuestro país se sitúe a la vanguardia del progreso industrial y tecnológico". Por ello, ha destacado la "apuesta ambiciosa" por impulsar este PERTE, que tiene el objetivo de atraer importantes inversiones en la industria de los semiconductores y de las nuevas tecnologías relacionadas, que serán "clave" para alcanzar la autonomía estratégica ansiada a nivel europeo.
Dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, el Ejecutivo ya ha aprobado nueve PERTE: para el desarrollo del vehículo eléctrico y conectado; para la salud de vanguardia; de energías renovables, hidrógeno y almacenamiento; el agroalimentario; el de Nueva economía de la lengua; el de la economía circular; el de industria naval; el aeroespacial; y el de la digitalización del agua. En total, el Gobierno calcula que con estos proyectos estratégicos se movilizarán 56.000 millones de euros, de los cuales 19.000 provienen de los fondos europeos y el resto supone apalancar inversión privada.
Además, hay otro PERTE anunciado, de la economía social de los cuidados, y a ellos se les suma ahora el de los microchips y semiconductores. El impulso de este último proyecto estratégico se enmarca en un contexto marcado por la guerra en Ucrania por la invasión de Rusia, que ha provocado un 'shock' en la oferta ante el peso exportador de estos países sobre determinadas materias primas. En este sentido, Sánchez ha explicado que ambas regiones son proveedoras fundamentales de argón y de neón, que se utilizan en la producción de los semiconductores.
A pesar de ello, el presidente ha afirmado que este impacto de la guerra no desvía la intención del Gobierno de modernizar el país, para lo que será "fundamental" la aceleración en el despliegue del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Según ha informado, en los nueve meses que han trascurrido desde que se aprobó el Plan, se ha autorizado el gasto 27.928 millones de euros de los ejercicios presupuestarios para los años 2021 y 2022.
Además, en la página web del Plan de Recuperación se han publicado un total de 1.612 convocatorias por un importe de 27.027 millones de euros, de las que ya se han resuelto más de 524 por 8.552 millones, alcanzando a 11.486 proyectos beneficiarios.
El Gobierno "está hecho para todas las estaciones"
Aunque España venía registrando una recuperación "robusta" tras el impacto de la pandemia, el presidente ha señalado que la invasión ha alterado el cuadro macroeconómico internacional y organismos e instituciones de todo el mundo han rebajado sus previsiones. Pese a ello, ha asegurado que el Gobierno "está hecho para todas las estaciones", tanto para las duras como para las amables, que seguro "llegarán".
Sánchez también ha admitido que la guerra está afectando a la estabilidad económica de la Unión Europea y ha reconocido el "mal dato" de inflación adelantado de marzo (9,8%) en España, principalmente como consecuencia del alza de precios de la energía y el encarecimiento de los alimentos no elaborados.
Por ello, ha puesto en valor la aprobación del 'Plan de Respuesta' al impacto económico de la guerra en Ucrania, para el que el Gobierno contempla la movilización 16.000 millones de euros, de los que 6.000 millones corresponden a ayudas directas y bajada de impuestos y otros 10.000 al impulso de una nueva línea ICO.
"El mercado de la energía a nivel europeo no está funcionando"
El Plan incluye algunas medidas en el plano energético, ya que según Sánchez el mercado de la energía a nivel europeo "no está funcionando ni resistiendo al estrés al que viene sometido de un tiempo a esta parte".
En este sentido, y tras el reconocimiento de la península como 'isla energética' por parte del Consejo Europeo, los gobiernos de España y Portugal han presentado una propuesta preliminar a la Comisión Europea que establece un precio de referencia para el gas de 30 euros el megavatio (MWh), frente a los 120 euros a los que cotiza hoy.
Sánchez confía que antes de que termine el mes de abril España y Portugal tengan una respuesta de las instituciones comunitarias que les permita cumplir el fin de abaratar el precio de la electricidad.
"Esta posible solución evidentemente no llevaría aparejado un aumento del déficit de la tarifa ni tampoco tendría un impacto sobre las cuentas públicas. El propio sistema lo absorbería y lo regularía", ha precisado el presidente del Gobierno.