India y Pakistán (países nucleares) se encuentran al borde de un conflicto armado

Tras el ataque en Cachemira, India y Pakistán se preparan para un posible conflicto. ¿Qué pasará con sus armas nucleares y el papel de China?

Oscar Ruiz -Escudo Digital.

Experto en migraciones y analista internacional.

Guardar

Taj Mahal  detrás de alambradas de púas. Imagen de recurso.
Taj Mahal detrás de alambradas de púas. Imagen de recurso.

Después de ataque terrorista del pasado 22 de abril en la región de Cachemira, donde 26 turistas hindúes fueron asesinados, la tensión y el cruce de acusaciones entre las potencias nucleares de India y Pakistán no ha hecho más que crecer.

Dicho ataque fue perpetrado por militantes con base en Pakistán, según fuentes indias, y ya ha tenido consecuencias como la suspensión de algunos tratados entre ambos países y la prohibición de sobrevolar Pakistán para cualquier avión de la India. Pero esto podría ser solo el principio.

Las dos potencias no paran de aumentar su presencia militar a lo largo de la Línea de Control (LoC), y ya se han producido intercambios de fuego en varias regiones. Por si no fuera poco, India ha cedido la potestad a sus militares para decidir la respuesta adecuada, mientras que Pakistán ha advertido sobre una posible incursión militar india en su país en las próximas 24 a 36 horas.

​La historia de este conflicto nos ha enseñado que cada vez que se produce un “calentamiento” de la situación entre estos dos Estados, las respuestas militares de limitan a la zona de Cachemira para evitar la gran escalada militar que podría producirse, como ya ocurrió en el 2016 y 2019. Pero la situación actual parece más volátil de lo habitual.

Mapa de la frontera entre India y Pakistán con la disputada región de Cachemira. Fuente: Fundación cibei.org.
Mapa de la frontera entre India y Pakistán con la disputada región de Cachemira. Fuente: Fundación cibei.org.

¿Qué pasaría con las armas nucleares?

India y Pakistán tienen armas nucleares. Ya solo esta afirmación distingue a este conflicto de cualquier otro en el que los estados en liza escalarían hacia un conflicto convencional. Y aunque la India asegura respetar su doctrina de no utilizar armas nucleares a menos que sea atacada primero, la situación sigue siendo preocupante. Pakistán, por su parte, tiene una política de uso de armas nucleares más ambigua que Delhi y simplemente ha indicado que podría usar armas nucleares si su existencia se ve amenazada.​

Si todo “fuera bien” en esta crisis, India se limitaría a utilizar su doctrina "Cold Start" en la que realizaría ataques convencionales rápidos y limitados para evitar la mencionada escalada nuclear. Pero en esta ocasión tenemos un problema mayor, y es que Pakistán ha desarrollado armas nucleares tácticas como contramedida, facilitando y aumentando el riesgo de uso nuclear en un conflicto convencional.

Como siempre, y aunque ambos países han mostrado moderación en el pasado, no se puede descartar el riesgo de una escalada nuclear. Siempre se pueden producir errores de cálculo o provocaciones adicionales en este ambiente de máxima tensión.

El delicado rol de China en este conflicto

China es un aliado estratégico de Pakistán y este escenario se encontraría en una situación muy delicada.

Pero, ¿cómo afectaría realmente un conflicto militar entre India y Pakistán a Pekín? Aquí China tiene intereses económicos y estratégicos en juego, especialmente en relación con el Corredor Económico China-Pakistán (CPEC), que atraviesa precisamente áreas disputadas en Cachemira. Además de esto, un conflicto prolongado podría desestabilizar la región, afectando de manera importante a las inversiones chinas.

¿Cómo puede afectar este conflicto al resto del mundo?

Como cualquier otro conflicto (convencional o nuclear) entre Estados un enfrentamiento entre India y Pakistán tendría repercusiones globales. Entre estas encontramos:​

  • Consecuencias económicas, debido a que la región es clave para el comercio mundial. Se podría interrumpir rutas comerciales y afectar mercados financieros globales.​
  • Consecuencias humanitarias, puesto que se desencadenaría una crisis humanitaria, desplazamientos masivos y aumento considerable de refugiados, presionando a países vecinos y organizaciones internacionales.​
  • Seguridad para el planeta, porque el uso de armas nucleares, aunque fueran tácticas, tendría consecuencias devastadoras, incluyendo impactos ambientales y de salud pública que trascenderían las fronteras regionales.​
  • Y consecuencias diplomáticas ya que Estados Unidos, Rusia y la Unión Europea, se verían obligadas a intervenir diplomáticamente, lo que podría alterar alianzas y equilibrios geopolíticos existentes.​

Estamos de nuevo ante la posibilidad real de una confrontación armada entre India y Pakistán, con todas las posibles consecuencias que acabamos de analizar. Un error de cálculo en este ambiente de máxima tensión podría dar lugar a una escalada que tendría consecuencias catastróficas no solo para ellos, sino para la estabilidad global, que ya no anda muy fina por cierto.

Quizás, suavizar esta crisis sea “responsabilidad” de China (por motivos geográficos, económicos y estratégicos), país que se suele “poner de lado” y mostrarse neutral en conflictos armados entre actores estatales.