Ser miembro de las fuerzas de seguridad no es fácil. A la presión derivada de las responsabilidades de este trabajo hay que sumar los ejemplos de compañeros que han hecho su carrera en las televisiones y que marcan un standard muy alto. Se llegó a temer que Paolo Vasile, a fuerza de fichajes en Telecinco, acabara vaciando el cuerpo de la Guardia Civil contratando a tanto miembro del cuerpo bien formado.
Primero fue José, el de La Isla de las Tentaciones, catapultado a la fama tras una foto publicada en la cuentra de Instagram de la Benemerita en la que lucía unos ojos preciosos y unos brazos espectaculares. Luego le tocó el turno Jorge Pérez, el Guardia Civil que posó con boina en una imagen y en otra con alas de ángel; saltó a la fama después de que sus fotos se hicieran virales en redes sociales. La imagen de la boina publicada por la cuenta oficial del cuerpo cambió por completo su vida: triunfó como modelo, fue a Supervivientes en el año 2020 y ahora triunfa como tertuliano en Telecinco, donde gracias a su inteligencia y mesura es capaz de abordar cualquier tema sin elevar la voz, y consiguiendo que sus compañeros le escuchen siempre. Tiene una autoridad natural, músculos y un buen pelo.
¿Tan importante es que un policía tenga una buena mata de pelo?
Parece que ese no es el caso de algunos policías de Santa Cruz. Florentino Guzmán, edil socialista de la localidad tinerfeña, ha reprochado a la concejala de Seguridad, Evelyn Alonso, de Cs que "intente llegar a un acuerdo con una clínica de cirugía capilar para facilitar a los policías un trasplante de cabello". El edil ha llegado a decir esto: "Si te preocupa que no tengan un pelazo de ensueño se acabó el sufrimiento".
Es de sobra conocido el sentido del humor de los políticos canarios, pero el hecho es absolutamente verídico. Como demuestran esta imagen, el sindicato CSIF ha rechazado el acuerdo:
Es un hecho conocido que cada vez son más los españoles que viajan a Turquía a la búsqueda de implantes capilares. Al parecer, según ha podido saber Escudo Digital, la empresa en cuestión se decidió a hacer la oferta porque consideró que era una buena táctica para conseguir clientes. A ello hay que sumar que un policía municipal quedó descontento con los resultados obtenidos, el pelo no creció tras ser implantado, motivo por el cual algunos compañeros suyos, descontentos con su imagen, optaron por la opción turca. Contactar con la concejala de Ciudadanos y ofrecer unos precios razonables les pareció una opción muy lícita. No ha habido suerte.