Cuando una empresa desarrolla un software, oculta su código, de forma que el resto de los desarrolladores no puede conocerlo ni modificarlo. Por contraposición, en el código abierto, se inspira en el concepto de open source software, cuya abreviatura es OSS por sus siglas en inglés. En este tipo de software, el código fuente es público y está disponible para ser modificado: tanto programadores como usuarios pueden adaptarlo y distribuirlo. Se trata de un modelo colaborativo que mide el Open Source Contributor index a nivel mundial, según ha difundido Europa Press.
Pyton, uno de los lenguajes más utilizados
Según sus datos, Google es la empresa comercial que más contribuciones ha realizado al código abierto en el último año, seguida de Microsoft y Red Hat.
Google ha incrementado su contribución al código abierto en un 10,5 respecto a julio de 2021, con 5.421 contribuyentes (trabajadores de la empresa), 347 más que un año antes. De esta forma, mantiene la primera posición que alcanzó a principios de año, relegando a Microsoft a una segunda posición.
Por detrás se encuentra Red Hat, que crece un 14,2% respecto a julio de 2021 (3.666 contribuyentes); Intel, con un incremento de sus aportaciones del 17,7% (2.237 contribuyentes); e IBM, que desciende un 1,7% (2.089 contribuyentes).
El OSCI también recoge otros datos, como los lenguajes más utilizados, un listado que lideran Python (15,5%) y TypeScript (15,1%); y las licencias de uso, con GPL-3.0 y Apache-2.0 acaparando el 60%.