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Lo que nos asusta y nos gusta en España de la Inteligencia Artificial

Solo un 28% de los españoles estarían dispuestos a subirse a un taxi autoconducido

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Los vehículos autónomos no generan aún confianza.
Los vehículos autónomos no generan aún confianza.

La Inteligencia artificial produce miedo, o desconfianza, en algunos sectores de la población. En otros, bien al contrario, produce una mezcla de optimismo y satisfacción, Y en algunas personas, como el multilimillonario Elon Musk, ambas cosas.

El fundador y Ceo de Tesla declaró recientemente en Shanghai que la adopción masiva de la Inteligencia Artificial va a acabar con muchos puestos de trabajo, a la vez que recomendaba abiertamente a todos trabajar en esa área y hacía un llamamiento para reclutar a los mejores talentos del sector

Pero, ¿qué opinan realmente los ciudadanos de esta tecnología? Una encuesta a 1400 ciudadanos realizada en España en julio de 2021 diseñada conjuntamente con Alex Kuo (Oxford University), Nicolas Bicchi (Universitat Pompeu Fabra) y Shir Raviv (Tel Aviv University) analiza las percepciones ante una tecnología que utilizamos diariamente, desde Netflix al robot aspirador.

Según recoge eldiario.es, solo un 28% de la población estaría dispuesta a subirse a un taxi autoconducido. Una cifra muy baja que revela cierta desconfianza hacia los vehículos autónomos, una de las tecnologías llamada a ser clave en el futro con la implantación del 5G.

El 41% de los españoles se muestran dispuesto a usar inteligencia artificial para sus diagnósticos médicos. Es un porcentaje algo mayor, pero supone aún una barrera muy alta para implantar los servicios de eHealth por los que apuesta gran parte de la sociedad. Las inversiones en este campo subieron un 51% en el último trimestre, según datos de CBInsights

La Inteligencia Artificial es ya considerada por muchos como el gran aliado de los médicos. Desde agilizar el desarrollo de nuevos fármacos a analizar el genoma de un paciente, las aplicaciones que ya están en marcha son numerosas. Pero la IA se perfila, sobre todo, como una herramienta capaz de aprender y analizar con rapidez enormes cantidades de información de los historiales de pacientes, de las pruebas de imagen y de los avances científicos para ayudar a los doctores a ofrecer mejores diagnósticos y tratamientos.

Antes deberá ganarse, eso sí, la confianza de los españoles, que tampoco ven con buenos ojos que sea un algoritmo el que determine como se distribuyen los subsidios al desempleo. Solo un 37% apoyan que una IA pueda definir la cuantía de la prestación conforme a estimaciones de si el paro será o no de larga duración.

Lo que sí nos gusta de la IA

Por el contrario, algunas aplicaciones de la IA son ampliamente aceptadas por la sociedad española. El 78% da su apoyo a patrullar áreas de la ciudad en base a la probabilidad de que haya robos; el 68% apoya instalar iluminación en base a la probabilidad de que ocurran crímenes en las calles; y el 47% se muestra favorable a implementar órdenes de alejamiento en base a la probabilidad de sufrir violencia de género.

Se deduce de este análisis que las aplicaciones de inteligencia artificial en ámbitos relacionados con la seguridad son más populares que su uso en temas relacionados con los derechos sociales.