¿Sabes cómo aumentar la ciberseguridad en tu hogar?

En 2022, una de cada cinco empresas españolas sufrió incidentes de seguridad y el trabajo remoto se encuentra entre los principales motivos.

Anahí Di Santo.

Periodista.

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La ciberseguridad en el hogar se vuelve fundamental.
La ciberseguridad en el hogar se vuelve fundamental.

El aislamiento social que demandó la pandemia dio el puntapié inicial para el teletrabajo, una modalidad que se ha instalado y trajo varios beneficios, como una mejor conciliación entre el trabajo y la vida personal de los empleados y la reducción de algunos costos para las empresas.

Durante 2022, si bien el trabajo a distancia habitual ha bajado de un 7,9% al 6,4%, el teletrabajo ocasional ha aumentado del 5,7% hasta el 6,1%, según un estudio del Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI). Así, el verano es una ocasión en la que esta modalidad vuelve a considerarse, ya sea desde la vivienda principal o la segunda residencia.

El problema que acarrea, sin embargo, es que, al salir del área de ciberseguridad establecida en las oficinas, los equipos de teletrabajo no poseen el mismo nivel de protección frente a posibles brechas de seguridad, situación que es aprovechada por los ciberdelincuentes.

Un informe elaborado por la oficina de estadística europea, Eurostat, ha revelado que durante el año pasado el 17% de las empresas con 10 o más empleados en España ha sido víctima de episodios de seguridad relacionado a las TIC. Algunas de las consecuencias de estos ataques son la destrucción o alteración de datos, la filtración de información confidencial o el bloqueo de acceso a servicios de información y comunicación.

Para evitarlo, muchas organizaciones están trabajando en la implantación de medidas para garantizar la seguridad y privacidad de sus datos, dispositivos y sistemas. Una de ellas es Devo, una compañía de seguridad y análisis de datos nativa de la nube, que comparte 6 consejos importantes para aplicar en casa y evitar posibles brechas de seguridad.

  • Mantener todos los dispositivos actualizados. Esto permite solucionar posibles errores o fallos operativos que puedan reducir el rendimiento de los equipos, pero, sobre todo, nos ponen al día con los parches y actualizaciones de seguridad.
  • Utilizar la autenticación multifactor (MFA). Esto implica que la verificación de identidad se completa con un segundo dispositivo vinculado. Aunque suele ser vista por los empleados como un sistema algo tedioso, es un método clave para proteger las cuentas y lograr entornos más seguros.
  • Cambiar la contraseña del router. La mayoría de los usuarios hogareños mantiene la clave que viene por defecto en los equipos que les envían las compañías proveedoras de Internet. Y esto es un error fácil de saldar que puede tener consecuencias, ya que cualquier delincuente que se encuentre cerca puede acceder a la red, pudiendo llevar a la compañía a vivir una situación crítica.
  • Establecer redes para invitados. Es importante que los profesionales no faciliten a las visitas que reciban en casa la propia red inalámbrica con la que trabajan o usan de forma personal. Esto impedirá que terceros vean las carpetas compartidas, impresoras y dispositivos de almacenamiento. Y es muy sencillo de realizar: desde la configuración del router se debe establecer un SSID (el nombre con el que se identifica una red wifi) y una contraseña de invitado independientes.
  • Encriptación o cifrado de datos. Esto permite que la información enviada por el emisor sea legible sólo para el destinatario -que en este caso serían el equipo inalámbrico y el dispositivo de trabajo- aplicando una clave privada. Es un método que convierte la información (textos, fotos, archivos, datos de aplicaciones, etc.) en un código secreto que impide que una persona o dispositivo no autorizados puedan descifrarlo.
  • Activar el cortafuegos del router. La mayoría de usuarios desconoce que los firewalls de los routers están desactivados por defecto. Es muy importante activarlo de forma manual, yendo a la sección de configuración avanzada del aparato. Puede ocurrir que estos cortafuegos afecten la velocidad de Internet. Para evitarlo, se puede desactivar mientras dure la tarea que requiera de un alto rendimiento del dispositivo y volver a activarlo al finalizar dicha acción.