En la era digital actual, donde la tecnología impulsa casi todos los aspectos de nuestras vidas, la ciberseguridad se ha vuelto más crucial que nunca. Las amenazas cibernéticas están en constante evolución, afectando a individuos y empresas por igual. La concienciación y las barreras de detención constituyen una primera línea de defensa, pero desgraciadamente casi nunca es suficiente. Nada nos garantiza hoy que, de una forma u otra, no vayamos a ser atacados.
En este contexto, proteger tus activos con un seguro parece una idea razonable, y más si el quien te lo propone es un figura respetada e independiente como un corredor de seguros. Este tipo de profesionales, cuyo número no deja de crecer en España, ofrece al cliente final un análisis objetivo que le permite, siempre basándose en sus criterios profesionales, recomendar el seguro que más le conviene.
Por lo general, el análisis queda cerrado cuando se han valorado al menos 3 propuestas de diferentes entidades aseguradoras, teniendo en cuenta las necesidades del cliente y los conocimientos del corredor. También informan al cliente sobre las condiciones del contrato y recomiendan la cobertura que mejor se adapte a su estilo de vida y necesidades.
En 2024, los corredores de seguros desempeñan un papel vital en el desarrollo de cualquier actividad económica, al ofrecer una capa adicional de protección a través de sus productos. Pero... ¿por qué deberían estos profesionales siempre considerar incluir el ciberseguro en su cartera de servicios?
1. Protección ante Amenazas Digitales en Constante Evolución
Las amenazas cibernéticas no son estáticas; evolucionan de manera constante a medida que los ciberdelincuentes buscan nuevas formas de explotar vulnerabilidades. Desde ataques de ransomware hasta phishing sofisticado, las empresas enfrentan una amplia gama de riesgos. Los ciberseguros proporcionan una red de seguridad adicional, ayudando a mitigar las consecuencias financieras y operativas de estos ataques.
Las consecuencias económicas para las empresas por perdidas de datos, interrupción de sistemas o errores humanos pueden suponer entre 2.000 y 50.000€ para las pymes, según INCIBE. En cuanto a las empresas grandes, el coste medio de un ataque se eleva hasta los 3,6 millones de euros de media.
2. La Importancia de la Prevención y la Respuesta Rápida
Los ciberseguros no solo se centran en la compensación financiera después de un ataque, sino que también promueven la prevención y la respuesta rápida. Aseguran, como en el caso de Telefónica Seguros, respuesta inmediata con el fin de devolver los sistemas y la operativa a su estado anterior al ciberincidente.
Al ofrecer servicios que incluyen evaluaciones de seguridad y planes de respuesta, ayudan a sus clientes a estar mejor preparados para enfrentar las amenazas cibernéticas. Esto no solo beneficia a las empresas desde una perspectiva financiera, sino que también contribuye a la construcción de una sólida reputación frente a sus clientes y socios comerciales.
3. Protegiendo la Información Confidencial
Las empresas almacenan hoy en Internet una cantidad significativa de información confidencial, desde datos de clientes hasta información financiera. Un ataque cibernético exitoso puede derivar en la pérdida o el robo de estos datos, lo que no solo afecta a la empresa sino también a sus clientes. Los ciberseguros proporcionan una red de seguridad vital al cubrir los costos asociados con la recuperación de datos, las notificaciones de brechas de seguridad y la gestión de la reputación después de un incidente.
4. Cumplimiento de Normativas y Regulaciones
En un entorno empresarial cada vez más regulado, el incumplimiento de normativas de ciberseguridad puede resultar en sanciones financieras significativas. Los corredores de seguros que ofrecen ciberseguros pueden asesorar a sus clientes sobre las normativas aplicables y garantizar que estén adecuadamente cubiertos para cumplir con estas regulaciones. Esto no solo protege a las empresas de posibles sanciones, sino que también refuerza la confianza de los clientes y socios comerciales.
5. Adaptación a la Realidad del Trabajo Remoto
La creciente tendencia hacia el trabajo remoto ha aumentado la superficie de ataque para las amenazas cibernéticas. Con empleados accediendo a redes corporativas desde diversas ubicaciones y dispositivos, las empresas enfrentan nuevos desafíos en términos de seguridad. Los ciberseguros ofrecen cobertura adaptada a la realidad del trabajo remoto, protegiendo a las empresas contra los riesgos asociados con la dispersión de la fuerza laboral.
Hoy, la ciberseguridad no es simplemente una preocupación técnica, sino un componente integral de la gestión de riesgos en el siglo XXI. Los corredores de seguros pueden mejorar su valor como profesionales al incluir en su cartera las herramientas necesarias para enfrentar las amenazas cibernéticas, asegurando a las empresas la continuidad del negocio y protegiendo su reputación. En un mundo digital en constante evolución, el ciberseguro se convierte en un escudo crucial para las empresas que buscan prosperar en nuestros días.