Venezuela crea el Estado de Esequibo

La comunidad internacional, incluidas las Naciones Unidas, ha instado a una solución pacífica y legal al conflicto.

Oscar Ruiz -Escudo Digital.

Experto en migraciones y analista internacional.

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La tensión entre Venezuela y Guyana sobre el Esequibo se ha agudizado con la visita del director de la CIA a Guyana.
La tensión entre Venezuela y Guyana sobre el Esequibo se ha agudizado con la visita del director de la CIA a Guyana.

La Asamblea Nacional de Venezuela, siempre bajo el control del gobierno de Nicolás Maduro, aprobó recientemente una ley que crea el estado de Guayana Esequibo en un territorio actualmente en disputa con Guyana, que tiene el control oficial del área.

Esta ley, denominada Ley Orgánica para la Defensa del Esequibo, otorga al presidente de Venezuela la facultad de nombrar al gobernador del mencionado territorio y concede a la Asamblea Nacional el poder legislativo sobre él hasta que se resuelva la disputa. Además, la ley contempla la posibilidad de inhabilitar a aquellos candidatos que hayan apoyado la posición de Guyana respecto al territorio y permite impugnar estas candidaturas ante el Tribunal Supremo de Justicia.

El diputado Diosdado Cabello anticipa que la ley provocará reacciones internacionales en contra de Venezuela, particularmente mediante sanciones relacionadas con la explotación de recursos naturales en el Esequibo. También se menciona un proyecto legislativo adicional para penalizar a los considerados traidores al país.

La tensión entre Venezuela y Guyana sobre el Esequibo se ha agudizado con la visita del director de la CIA a Guyana, interpretada por el canciller venezolano como una amenaza. Mientras tanto, Guyana insiste en que Venezuela debe respetar los límites establecidos por el Laudo Arbitral de París de 1899, algo que Caracas rechaza. Estados Unidos ha expresado su apoyo a Guyana, abogando por una resolución pacífica del conflicto.

La crisis del Esequibo entre Venezuela y Guyana es un conflicto territorial que viene de largo y ha escalado en los últimos años. Se centra en el Esequibo, un vasto territorio rico en recursos naturales que abarca unos 160.000 kilómetros cuadrados, lo que representa casi dos tercios de la actual Guyana. La disputa se remonta a más de un siglo atrás, pero ha ganado prominencia reciente debido a varios factores, incluidos los intereses económicos y geopolíticos internacionales.

La disputa tiene su origen en la época colonial, cuando tanto la actual Venezuela como Guyana (entonces Guayana Británica) reclamaban la región. En 1899, un tribunal de arbitraje en París dictaminó a favor de Guyana Británica, estableciendo los límites actuales de Guyana. Venezuela ha rechazado este laudo arbitral, alegando que fue injusto y que no se le permitió presentar adecuadamente su caso.

Escalada reciente

La crisis ha escalado en los últimos años, especialmente después del descubrimiento de importantes reservas de petróleo en la costa de Guyana, cerca del territorio disputado. Estos hallazgos han atraído el interés de empresas internacionales de energía y han aumentado la importancia estratégica del Esequibo para ambos países.

En este contexto, Venezuela reivindica la soberanía sobre el Esequibo, basándose en reclamos históricos y argumentando que el laudo de 1899 fue fraudulento. Por su parte, Guyana sostiene que su soberanía sobre el territorio está bien establecida y reconocida internacionalmente, incluyendo el laudo de 1899, y busca una resolución pacífica del conflicto a través de medios legales internacionales, como la Corte Internacional de Justicia (CIJ).

El conflicto ha atraído últimamente la atención internacional, con países y organizaciones tomando partido u ofreciendo mediar. Estados Unidos ha mostrado apoyo a Guyana, en parte debido a sus intereses estratégicos en la región y la inversión de empresas estadounidenses en el sector energético de aquel país. La situación también ha suscitado preocupaciones sobre la estabilidad regional y el impacto de la disputa en las relaciones internacionales en América Latina.

El caso está actualmente ante la Corte Internacional de Justicia, que está evaluando su jurisdicción para decidir sobre el fondo del asunto. Mientras tanto, la tensión entre los dos países persiste, con incidentes ocasionales y una retórica fuertemente nacionalista de ambos lados. La comunidad internacional, incluidas las Naciones Unidas, ha instado a una solución pacífica y legal al conflicto. Nicolás Maduro parece estar usando esta crisis para “quitarse” competidores políticos en su camino electoral para las próximas elecciones de este año.

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