Crosscall es una compañía francesa especializada en la fabricación de teléfonos y accesorios resistentes que nació en 2009. Su fundador, Cyril Vidal, aficionado al deporte y acostumbrado al trabajo en exteriores, se encontró con que no existían dispositivos móviles que pudieran satisfacer sus necesidades satisfactoriamente ni para la parte empresarial ni para la lúdica. Así, fundó la empresa para crear móviles estancos y sumergibles, dando paso a una categoría denominada 'outdoor mobile technology'.
Crosscall, aunque fabrica sus productos en China a través su proveedor Hisense, trata de hacer todo el proceso industrial completo. Buscan entender las necesidades de los usuarios que posteriormente aplican en sus modelos y hacen todos los tests necesarios y pasan las certificaciones correspondientes para poder producirlos. Hasta la fecha la firma ha vendido más de 4 millones de terminales, según ha revelado su responsable en España, María Jesús Tamayo, en una reunión en petit comite con los medios.
"Nuestro mayor compromiso es la durabilidad", ha incidido la Country Manager de Iberia. En esta línea los dispositivos de la marca cuentan con el estándar IP68. Es decir, pueden sumergirse en profundidades de un metro durante un intervalo máximo de 30 minutos y también son estancos a polvo y partículas. Para garantizar esto, realizan diversas pruebas con los mismos tenéfonos exponiéndolos a agua salada, geles, etc.
Además, los teléfonos de Crosscall cumplen con el estándar militar desarrollado por el Departamento de Defensa de EE.UU. MIL-STD-810h. Esto supone que un producto ha pasado una batería de pruebas rigurosas enfocadas en condiciones ambientales. De las 20 pruebas que hay en total los smartphones de la compañía gala cumplen 15. A las otras 5, por decirlo así, han decidido "no presentarse".
Asimismo, Croscall ha creado sus propios estándares. En total, someten a los terminales a 80 pruebas diferentes. Estos experimentos le permiten estar en condiciones para ofrecer una garantía de 5 años que incluye la batería si esta falla por debajo de 80 por ciento.
Quieren ser el proveedor de la policía y del ejército
Poco a poco el fabricante ha ido virando desde sus enfoques B2C (business to consumer) y B2B (business to business) a uno más B2G (business to government)
Desde 2021 la compañía equipa a la Policía Nacional de Francia y Gendarmería de teléfonos móviles. Crosscall consiguió una licitación junto a Orange Business Services para equipar a todas sus fueras operativas durante un intervalo de 4 años con 220.000 dispositivos.
Estos smartphones están dotados de una versión de Android que no lleva la habitual capa de personalización que suelen incluir los fabricantes o las operadoras. Se entregan con Google Android Open Source Project preinstalado. Así es el propio Ministerio del Interior galo quien puede introducir su propia capa de seguridad para proteger los dispositivos y salvaguardarlos de cara al futuro.
En esta ocasión dicha capa es desarrollada por el operador de sistemas de información interministeriales clasificados (OSIIC), una entidad de la Secretaría General de Defensa y Seguridad (SGDSN) de Francia.
Crosscall destaca por ser el primer fabricante en incluir un chipset para la banda 68. Este espectro ha sido delimitado por Europa y está destinado para comunicaciones críticas, con fines de Seguridad, Defensa, etc. Estos móviles también son compatibles con burbujas tácticas, sistemas de comunicaciones ad hoc y que se crean sobre la marcha y temporalmente para operaciones especiales, servicios de emergencia, rescate, etc.
Una de las características en las que ha ahondado la compañía francesa con su hardware es en la funcionalidad Push to Talk, para transformar los smartphones en walkie talkies. La idea es que las fuerzas y cuerpos de seguridad cuenten con la máxima simplicidad para comunicarse, considerando las diferentes situaciones de riesgo o movimiento en las que puedan estar inmersos. Es decir, que solo tengan que pulsar un botón para poder hablar con otro compañero.
Por otro lado, desde 2021 Crosscall es miembro de TCCA (the Critical Communications Association), organización que representa todos los estándares de las tecnologías de comunicaciones críticas y aplicaciones complementarias.
La firma francesa ha personalizado el hardware para los requerimientos de la Policía y Gendarmería, así como sus accesorios. En este sentido, tiene un amplio catálogo que incluye productos preparados para usar los terminales casi sin manos o fijarlos al cuerpo para que se puedan usar sin problemas en circunstancias delicadas.
En España Crosscall está pendiente de una licitación para ser el proveedor de los servicios de emergencia en Madrid, Extremadura y otras comunidades autónomas.
Tecnología Made in Europe
El objetivo de Crosscall es convertirse en el primer fabricante de teléfonos móviles que produce un modelo 5G en Europa. La firma está trabajando para que durante el primer semestre de 2024 puedan contar con una línea de ensamblaje en el Viejo Continente, en Francia. En principio fabricarán allí este modelo y si el mercado responde bien tratarán de reducir su dependencia de sus proveedores chinos haciendo más motu proprio.
"Hay polos claros con EE.UU. en uno y China y Corea en otro. Queremos cubrir ese vacío que tiene Europa, que no fabrica sus propios productos".