La ducha que reduce el uso de agua un 90% y ahorra un 80% de energía

Al diseñador sueco Mehrad Mahdjoubi se le ocurrió la idea de reciclar el agua cuando trabajaba en el programa Journey to Mars de la NASA.

Gonzalo Díaz Bonet.

Especialista en Tecnología y Sostenibilidad.

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Una ducha de 10 minutos desperdicia 200 litros de agua. Así que si conseguimos reducir su uso en un 90% estaremos ahorrando 180 litros. Y hasta un 80% de energía. Parece un punto de partida válido para hacer frente a uno de los problemas más acuciantes del siglo XXI: la escasez de agua potable en todo el planeta. 

Bajo esta atractiva premisa se presenta Oas, una ducha de circuito cerrado desarrollada por la compañía Orbital Systems que utiliza un 80% menos de energía y un 90% menos de agua que una convencional. Los resultados que promete la marca son posibles gracias al filtrado y al reciclado del agua y han sido probado en misiones espaciales. 

De hecho, al artífice del invento, el joven diseñador sueco Mehrad Mahdjoubi, se le ocurrió la idea de reciclar el agua cuando trabajaba en el programa Journey to Mars de la NASA. Posteriormente, fue nominado a inventor del año en la categoría de PYMEs por la Agencia Europea de Patente en el año 2018. 

Sin embargo, y a pesar de haberse testado ya con éxito, esta ducha es por el momento bastante cara. A causa de su baja producción, actualmente una unidad cuesta hoy más de 3.000 euros. Aunque todo podría cambiar si recibe la atención adecuada. Mahdjoubi calcula que en un par de años podría valer unos 500 euros y que podrían llegar a costar unos 50 euros más adelante. 

duchas de la compañía Orbital Systems
 Orbital Systems

¿Cómo funciona la ducha? 

Para reducir el malgasto del agua, pero asegurarse de que la calidad es buena, Orbital ha equipado a Oas con sensores que analizan el agua midiendo su conductividad. Cuanto más conductora es el agua, más agentes contaminantes tiene, por lo que el sistema mide 20 veces por segundo el líquido y solo reutiliza el que está bien. 

Además, Oas tiene dos filtros: uno de micras que elimina partículas grandes, como el cabello o la suciedad, y uno con tecnología UV, que se deshace de los microorganismos, como bacterias, virus o sangre. De este modo, el usuario se asegura de que el agua que pasa está limpia. 

También es importante recalcar que, si el usuario se ducha con agua caliente, esta sigue así una vez pasa el filtro, por lo que se necesita muy poca energía para 'recalentarla'. Así, Oas no solo sirve para ahorrar agua y puede usarse para gastar menos energía. 

Orbytal explica que el agua que se utiliza para una ducha se reemplaza automáticamente al acabar. Por lo tanto, cuando entra la siguiente persona, el agua es completamente nueva.