Ojo con la nueva tarjeta de El Corte Inglés: la OCU advierte

La principal novedad es que se trata de una tarjeta de crédito respaldada por Mastercard. Sin embargo, la OCU avisa que puede salir cara.

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Nueva tarjeta de compra de El Corte Inglés (Foto: OCU)
Nueva tarjeta de compra de El Corte Inglés (Foto: OCU)

"Más que un medio de pago, mucho más que una tarjeta". Así presenta El Corte Inglés la nueva tarjeta de compras que empezó a emitir con la llegada del 2023 en sustitución de la anterior, la clásica, que quedó en desuso el pasado 1 de enero.

Esta nueva tarjeta cuenta con los mecanismos de autenticación reforzada exigidos por la Ley de Servicios de Pago, señala la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) en una reciente publicación en la que pone el foco sobre la misma para explicar cuáles son sus principales características, y las similitudes y diferencias que mantiene con la versión tradicional.

Según indica la OCU, la nueva tarjeta de El Corte Inglés continúa siendo gratuita y mantiene las ventajas que tenía anteriormente, como las dos horas de aparcamiento gratuito en sus centros comerciales –siempre que se realice una compra superior a 35 euros– o la bonificación del 4% en las estaciones de servicio de Repsol, Campsa y Petronor. Lógicamente, y al igual que cualquier otra tarjeta de compra, sigue estando pensada para pagar en los establecimientos que las emiten y en otros comercios con los que la compañía ha llegado a un acuerdo comercial. En este caso, en todas las tiendas de El Corte Inglés, en las tres estaciones de servicio anteriormente citadas, así como en Sephora, Big&Drive y Tagus. No obstante, la nueva tarjeta de El Corte Inglés incluye evidentemente varias novedades.

Es una tarjeta Mastercard que puede usarse como cualquier otra tarjeta de crédito, pero que puede salir cara…

La novedad más destacada es probablemente que se trata de una tarjeta Mastercard, ajustada a la normativa de servicios de pago y que, a todos los efectos, es una tarjeta de crédito, en lugar de una tarjeta de compra como era la versión tradicional.

"La nueva tarjeta de El Corte Inglés es mucho más que una tarjeta de compras, es una auténtica tarjeta de crédito, emitida por MasterCard, domiciliada en tu cuenta, y puede usarse como cualquier otra tarjeta", indica la OCU.

Al respetar con la normativa de servicios de pago, cumple con la obligatoriedad de incorporar chip, lo que refuerza su seguridad relegando a la banda magnética. Además, ofrece la posibilidad de realizar compras online y de extraer dinero sin comisiones en los cajeros de El Corte Inglés, usando la aplicación y siempre que se pague una compra de al menos cinco euros.

Sin embargo, la OCU advierte que usar estar esta tarjeta para sacar dinero de cajeros automáticos sale caro, ya que a la totalidad de la comisión que aplica el cajero hay que sumar una comisión adicional del 4% con un mínimo de 3 euros. Además, apunta que si se utiliza fuera de la zona euro se aplica una comisión del 3% en concepto de cambio de divisa, por lo que es mejor utilizar otras alternativas como Revolut.

La nueva tarjeta de El Corte Inglés tiene dos líneas de crédito independientes entre sí, cada una con un límite: uno para las compras en los grandes almacenes y comercios adheridos, y la otra para compras en otros establecimientos. Asimismo, tiene dos modalidades de pago: una en el que las compras se cargan el último día del mes, sin intereses TAE 0% ni gastos de ningún tipo, y otra de pago revolving, que puede terminar ocasionando unos gastos muy superiores al importe de lo comprado.

Así lo advierte Adslzone, que pone como ejemplo una simulación de una compra inicial de 1.500 euros, dividida en 48 plazos mensuales con una cantidad lo más cercana a la cuota mínima de 45 euros mensuales que tiene la tarjeta El Corte Inglés. De esta forma, acabaríamos pagando 47 cuotas de 44,06 euros y una última cuota de 44,25 euros, elevándose el total a 2.115,07 euros, es decir, 615,07 euros más de intereses.

Finalmente, cabe resaltar que la tarjeta de El Corte Inglés ha acumulado cerca de 12 millones de usuarios a lo largo de sus 57 años de historia. Esta extensa base de clientes parece haber animado a la compañía a cambiar su formato, en una apuesta para hacer competencia a las tarjetas que ofrecen los bancos, pero también ha sido desaprovechada en otros de sus negocios. Concretamente en su servicio de alarmas y sistemas de seguridad, Sicor Alarmas, donde no está haciendo lo suficiente para captar a esta base de clientes, según informamos citando a expertos de marketing del sector.