Noches tropicales: esta es la temperatura a la que no podrás conciliar el sueño

Si la mínima del día supera los 20 grados, es probable que puedan comenzar los problemas con el sueño.

Gonzalo Díaz Bonet.

Especialista en Tecnología y Sostenibilidad.

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Es un clásico de todos los veranos. A veces llegan antes y a veces llegan después, pero nunca faltan a su cita. Por más que queramos huir de ellas, las olas de calor son ya parte del paisaje veraniego, tan arraigadas como las fiestas de pueblo, los chiringuitos o las cremas solares

Lo peor es cuando te pillan en plena ciudad, con sus islas de calor urbanas, y con la jornada laboral en plenitud de condiciones. Porque lo complicado de estas olas de calor no es afrontarlas durante el día, sino por la noche. Allí es donde se vuelven realmente terroríficas, y donde conciliar el sueño se convierte en todo un desafío. Y si dormir es complicado, madrugar al día siguiente, sin haber descansado bien, es poco menos que un infierno. 

Es lo que se conoce como “noches tropicales”, desde ayer presentes en buena parte del país. La temperatura ambiente juega un papel crucial en la calidad de nuestro sueño, y cuando las temperaturas son extremadamente altas, nuestras veladas pueden volverse interminables. 

La temperatura ideal para un sueño reparador generalmente se sitúa entre los 18 y 22 grados centígrados. Sin embargo, en muchos puntos de España estas cifras pueden ser difíciles de alcanzar, especialmente durante la temporada de calor intenso. Cuando la temperatura y la humedad aumentan, nuestro cuerpo se esfuerza por regular la temperatura interna, lo que puede provocar una sensación de incomodidad y sudoración excesiva. 

Cuando la temperatura ambiente se mantiene alta durante la noche, nuestro cuerpo tiene dificultades para enfriarse, lo cual es esencial para que podamos conciliar el sueño. Durante el sueño, nuestro cuerpo disminuye su temperatura interna para promover la relajación y el descanso. Sin embargo, en las noches tropicales (aquellas en las que el termómetro no baja en ningún momento de los 20 grados), este proceso se ve obstaculizado por las altas temperaturas, lo que dificulta la llegada del sueño reparador. 

Además del calor sofocante, la humedad también desempeña un papel importante en nuestro nivel de confort. Cuando el aire está saturado de humedad, la transpiración no se evapora tan rápidamente, lo que hace que nos sintamos pegajosos y sudorosos. La humedad excesiva puede aumentar la sensación de incomodidad y dificultar aún más la conciliación del sueño. 

Cuando las mínimas superan los 20 

Entonces, ¿cuál es la temperatura a la que no podrás conciliar el sueño? No hay una respuesta exacta, ya que varía según la tolerancia individual al calor y la humedad. Sin embargo, muchos estudios sugieren que las temperaturas superiores a los 24 grados afectan negativamente la calidad del sueño. A medida que las temperaturas se acercan o superan los 30 grados, el sueño se vuelve prácticamente imposible de alcanzar para la mayoría de las personas. 

Para los miles de aficionados a consultar la previsión de AEMET desde el móvil, hay igualmente una cifra que nos puede poner en estado de alerta. Si la mínima del día supera los 20 grados, es probable que puedan comenzar los problemas con el sueño. 

Según este mismo organismo, esta semana se esperan noches tropicales en las que la temperatura no descenderá de 25 grados en zonas del valle del Guadalquivir, en litorales de Granada y Almería, y en puntos de Mallorca. Un verdadero reto para conciliar el sueño. 

La influencia del cambio climático  

El aumento de las noches tropicales en los últimos tiempos no es fruto de la casualidad. España, como muchos otros países, ha experimentado un aumento significativo en las temperaturas durante las últimas décadas. Otro estudio de Aemet augura que el número de noches tropicales aumentará hasta un 30 por ciento para el final de este siglo. 

En España, Canarias es la comunidad que más noches tropicales registra al año con 92. Dentro de las islas, la pequeña isla de El Hierro, tiene más que cualquier otra zona con 128. En lo alto de la lista también están localidades como Cádiz, Melilla, Almería o algunas zonas de las islas Baleares. En general el Mediterráneo experimenta bastantes más noches tropicales que otras zonas de Europa.   

El aumento de las temperaturas medias y la falta de enfriamiento durante la noche debido al cambio climático son los principales factores detrás de este fenómeno. El calentamiento global está impulsado en gran medida por la liberación de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono en la atmósfera debido a actividades humanas como la quema de combustibles fósiles y la deforestación. Estos gases atrapan el calor en la Tierra, lo que deriva en un aumento gradual de las temperaturas globales.  

Para reducir sus efectos, es fundamental reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adoptar prácticas sostenibles en todos los sectores, desde la energía hasta la agricultura y el transporte. Cualquier avance en la sustitución de energías fósiles por energía verdes puede contribuir a algo tan vital como acabar durmiendo mejor por las noches. 

A nivel local, es importante implementar medidas para hacer frente a las noches tropicales. Esto puede incluir la promoción de la eficiencia energética en los edificios, la planificación urbana que tenga en cuenta el aumento de las temperaturas y la promoción de espacios verdes y áreas de sombra para mitigar el calor.